Conocida como Solemnidad del Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo, esta fiesta honra a Nuestro Señor Jesucristo, verdadera y realmente presente substancialmente bajo las apariencias del pan y del vino.
Con motivo de esta solemnidad, el domingo 11 de junio se realizó una concurrida procesión que se inició al terminar la misa en la parroquia de San Bruno, recorriendo las calles de Ñuñoa hasta llegar a la parroquia de Santo Domingo. Los fieles expresaron entusiasmados y llenos de alegría la fe en la presencia de Dios en medio de su Iglesia que, acompañada y fortalecida por Cristo-Sacramento va al encuentro de la humanidad.
El Pbro. Michael Javier Duarte, párroco de ambas parroquias, inició la procesión que culminó al llegar a la parroquia de santo Domingo, momento en que concluía la misa celebrada por el P. Vicente Croes, E.P.
La imagen peregrina de Nuestra Señora de Fátima acompañaba a Jesús Sacramentado suscitando la admiración de los fieles peregrinos.