Con una alegría comunicativa y la presencia de muchas familias llenas de fe, se consagraron cientos de personas a Jesucristo la Sabiduría eterna y encarnada por las manos de María Santísima, después de una profunda preparación del Padre Manuel Rodrigues EP.
El sábado 16 de marzo, los Heraldos del Evangelio celebraron tres Santas Misas en las que cientos de devotos de Nuestra Señora se consagraron a Nuestro Señor, por las manos de María, en la parroquia Santo Domingo de Guzmán en Ñuñoa y en la Casa de los Heraldos del Evangelio en Peñalolén.